El pasado 14 de abril, una mañana soleada en Alcalá de Henares se convirtió en escenario de una experiencia transformadora para dos colectivos que rara vez coinciden en el mismo espacio: por un lado, internos del Centro Cerrado Madrid II, participantes en el programa Reincorpora; por otro, mujeres con discapacidad intelectual atendidas por la Fundación Astier San José. Juntos, compartieron una jornada de paseo, conversación y cuidado mutuo, en un gesto sencillo pero cargado de significado.
📷El pasado 14 de abril, internos del #CentroCerradoMadridII, participantes en el programa #Reincorpora; participaron de una actividad de acompañamiento social a mujeres con discapacidad intelectual atendidas por la #FundaciónAstierSanJosé. pic.twitter.com/NwdJujy0tf
— Fundación SMP (@FSMP) April 22, 2025
La actividad, enmarcada dentro del itinerario de integración sociolaboral que impulsa el programa Reincorpora y gestionada por la Fundación San Martín de Porres, forma parte de una serie de servicios a la comunidad que tienen como objetivo reforzar las habilidades sociales de los internos, potenciar su autoestima y abrirles una ventana hacia formas de convivencia basadas en el respeto, la empatía y la solidaridad.
Para muchos de los internos, esta actividad no solo significó salir del entorno cerrado del centro penitenciario, sino también encontrarse con una realidad distinta que interpela y enriquece.
En tiempos donde la exclusión se multiplica, esta jornada fue un pequeño recordatorio de que la solidaridad también se aprende, se entrena y se ejerce en actos cotidianos. Un paseo, una mano tendida, una conversación pueden abrir caminos que, a menudo, no aparecen en los mapas.